Extracto: En medio de la era dorada de contenido que estamos viviendo, tu marca puede pasar completamente desapercibida si no has trabajado en una estrategia de posicionamiento bien fundamentada y efectiva. Conoce nuestros 11 tips para que empieces tu plan con el pie derecho.
En medio del trajín de la operación diaria que conlleva sacar adelante una empresa, es común dejar de lado el posicionamiento de marca. Pareciera que siempre habrán otros aspectos del negocio que fácilmente acaparan nuestra mente y tiempo. Pero si no prestamos atención al posicionamiento, puede que nuestro esfuerzo caiga sobre tierra infertil y que parte de nuestro trabajo termine siendo contraproducente.
El posicionamiento de marca es el lugar, alto o bajo, relevante o irrelevante, que tu marca ocupa en la mente de los consumidores: la conciencia y estima que tengan sobre tu producto/servicio y la valorización de los diferenciadores de tu marca en comparación con la competencia.
Estamos viviendo la era dorada del contenido. Sin una buena estrategia de posicionamiento, tu marca pasará desapercibida entre los miles de vídeos, publicaciones, carruseles, filtros, historias, reels, artículos, juegos y anuncios publicitarios a los que tus consumidores se ven expuestos todos los días.
Hay algunos tips importantes y elementales que puedes tomar en cuenta a la hora de empezar a planear tu estrategia de posicionamiento. Los compartimos a continuación:
Haz una lista de las ventajas y fortalezas que te diferencian de la competencia y sobre las que se basarán tu nueva estrategia.
Conduce los estudios y experimentos necesarios: asumir es un error común y garrafal. Cada paso de tu nueva estrategia de posicionamiento debe poder explicarse y apoyarse en resultados validados por sondeos, encuestas o estudios que te permitirán tomar las decisiones necesarias con más autoridad.
Redacta tu “declaración de posicionamiento”: una frase de 4 líneas (máximo) en la que describas cómo te gustaría que tu negocio sea percibido en la mente de tus consumidores. El escrito también deberá incluir una descripción concisa de tu negocio y mercado meta.
Analiza tu competencia: no querrás tomar acciones ni caminos que tus competidores también hayan elegido. Haz tu propio benchmark, o análisis comparativo entre tu actual posicionamiento y el de tu competencia, localiza tu ventana de oportunidad y tómala.
Conoce tu tribu: si no has interactuado y conectado con tus consumidores, nunca sabrás qué los motiva, cuáles son las verdaderas aflicciones que tu oferta puede aliviarles ni tampoco conocerás sus valores. Invierte tiempo conociendo a tu público. Aprovecha las redes sociales y no descartes la posibilidad de conducir entrevistas individuales a tus clientes.
Las colaboraciones son excelentes estrategias de posicionamiento que puedes implementar a tu plan maestro. Identifica influenciadores y marcas con las que puedes pactar alianzas claves.
Sé fiel a los valores de tu marca e inclúyelos como parte fundamental de tu plan de posicionamiento. Muchas de las marcas con mayor espacio en nuestra mente son aquellas cuyas estrategias se basan casi enteramente en resaltar sus valores. Por ejemplo: Nike o Disney.
Trabaja las emociones. En vez de decir “vendemos los carros más cómodos del mercado”, el mensaje pudiese ser: “siéntate, relájate y disfruta del paseo en familia”.
Involucra a tu comunidad en el proceso de prueba: cuando ya hayas decidido cuáles son los puntos diferenciadores que deseas resaltar y cómo lo harás, pruébalos con tu audiencia. Hoy existen muchas herramientas y técnicas accesibles para hacer análisis preliminares: campañas A/B testing en redes sociales; encuestas en Instagram; sondeos que se pueden enviar a tu base de datos a través de plataformas como Google Docs, HubSpot o Survey Monkey. En fin, aprovecha a tu audiencia, hazlos parte de tu toma de decisión. Esto te permitirá reevaluar, calibrar y rediseñar lo que debas.
Encuentra los medios adecuados para llegarle a tu público. Si tu mercado es la Generación Z, no la impactarás a través de Facebook, sino en TikTok. Mientras que Instagram sigue funcionando de maravilla para los millennials y Facebook para los baby boomers. Los tiempos cambian y, a su vez, el comportamiento de las audiencias.
Alínea tu contenido con los puntos que has decidido destacar como parte de tu estrategia de posicionamiento. Debes reforzarlos en cada oportunidad que tengas.
Una buena estrategia de posicionamiento no solo aumentará potencialmente tus ventas, también te ayudará a conectar de una forma más humana con tus clientes y forjará un espacio sentimental especial en sus mentes.
¡Estamos listos para ayudarte en cada paso!
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